
El libro tiene dos partes claramente diferenciadas: Las vivencias en Rama II y la vida en las colonias. Prefiero la primera sobre la segunda, y ha sido eso lo que ha alargado la lectura en demasía. En general la historia resulta interesante, bien narrada, pero termina peor de lo que empieza, ya que no tiene final (ni siquiera un final abierto), por lo que me quedé con ganas de continuar, aunque también con ganas de cambiar ya que su número de páginas impone un cierto respeto.
Pendiente, sobre todo por la original de AC Clarke, Cita con Rama, semilla que inicia todo el ciclo ramano.