Llevaba tiempo alejado de series/películas de terror y Hill House me ha traído de vuelta.
Aquí no hay terror al uso, es más una serie de fantasmas, que recoje muchos tópicos del subgénero, actualizándolos un poco, pero tópicos al fin y al cabo que no terminan de sorprender como debieran.
Pero esto no significa que la cosa pinte mal.
Al revés, la serie revisa todos los miedos y temores de un más allá poco amistoso. El gran 5º capítulo eleva el listón tal alto que hace que esperemos mucho más, y que no vamos a encontrar en capítulos posteriores. Una pena, porque manteniéndo ese nivel la convertiría en una de las mejores series hecha hasta el momento.
También es cierto que los niños bajan la media y sus interpretaciones no están a la altura.
Por lo demás, muy recomendable (con ese capítulo 5 que, por sí solo, vale la serie entera. Grandioso)