21 mayo 2006

El Código da Vinci

He tenido que verla, lo confieso. Pero solo para aumentar mi sociabilidad con las personas que sí estaban empeñadas en visionar lo que habían leído antes.

Que quede claro que del Código da Vinci apenas sabía nada. Solo la publicidad previa al film me dió cierta idea de lo que iba a contemplar en la gran pantalla.

De la novela, sé que fue publicada en el 2003 y que supuso para su autor algo así, como si le hubiese tocado la lotería. Se convirtió en best-seller. Y ya nadie dejó de hablar del Código (la iglesia censurándolo ayudó mucho, imagino). Los criticos literarios lo denostaban, pero la gente lo siguió comprando convirtiendose en numero uno en ventas en muchos países durante mucho tiempo.

Y yo sin querer enterarme.

Pero con el estreno de la película la cosa empezó a cambiar un poco: Intenté leerlo. Pero fuí incapaz. Lo dejé en el capítulo 5. Sólo diré que parece más un guión de película que un libro, ... ya entiendo por qué hasta el paisano que hacía la compra en un gran almacén se hacía poco menos el sabio no recomendandolo a su amigo : "Yo lo leí, y es muy malo ..." Por su aspecto físico y su forma de hablar, no parecía que hubiera leído muchos otros ...

Sobre la película y siendo tan novato en todo este lío del Código, sólo diré que me pareció increiblemente aburrida. Al no conocer casi nada de la historia, esperaba que al menos me sorprendiera, como en su día lo hizo con esos millones de lectores ... y me decepcionó. Demasiado esteriotipada, Dan Brown se va de listillo, diciendo que ha investigado mucho y visitado Europa varias veces (buf!) y por eso su libro esta tan bien documentado (sabe algo de París, de un tal Leonardo y de la 'secta' Opus Dei )
Jdr! Este tío no se ha leído el Nombre de la Rosa ???

Viendolo ahora todo con cierta perspectiva, debo confesar que sigo sin entender nada de todo este embrollo.

Y yo en mis cosas, enganchado al Nombre de la Rosa y con una completisima biografía del gran Leonardo esperando en mi bandeja de entrada. No parece coincidencia, pero sí la es.