Recuerdo haber pasado buenos ratos, y también recuerdo lo difícil que era.
Era una delicia ver como todos los personajes tienen vida propia. El director, los profesores, la profesora, los compañeros ... Al inicio puedes poner nombre a cada uno de los personajes del juego, y así consigues hacerlo un poco más real, e identificarlo con algún que otro compañero, de esos que todos hemos tenido en nuestros años de escuela.
Técnicamente, regular. Quizá la poca adicción que produce tanta dificultad sea lo que , a la postre, le reste puntos en su valoración final.