Te haces mayor y cada vez entiendes menos. Cada vez te sientes menos solo. Como si alguien te preparase el camino ese que todos comenzaremos cuando ya no seamos.
Algunos los llaman ángeles, otros intuición, otros Dios, mientras otros culpan de su debilidad a quienes ni les escuchan.
Esta vez han decidido por mí, no sé quién, o tal vez sí ... en cualquier caso, no siempre la razón gana: Con 2 jaque-mate a mi favor, he preferido ceder en la partida y dejar caer al rey ... y al final, paradojicamente, he sentido como si no hubiese perdido nada por el camino.